Conocemos a los clasificados chilenos al OEA Cyber Challenge 2023
Los próximos 25 y el 26 de octubre tendrá lugar en la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile la final del OEA Cyber Challenge (oea-cyberchallenge-chile), ejercicio de ciberseguridad que reúne a 40 estudiantes de todo el continente. Por nuestro país competirán Camilo Vera, Sebastián Zapata, Diego Arias y Pablo Aravena, que forman uno de los 10 equipos nacionales a disputar la corona.
Pasemos a conocer algo sobre cómo se interesaron por la ciberseguridad y qué piensan de seguir una carrera en este rubro.
Sebastián cuenta que en la universidad aprobó un par de cursos sobre ciberseguridad que le gustaron mucho, y que si bien sus focos actuales están en DevOps y la arquitectura de soluciones en la nube, reconoce la importancia de la inclusión de la ciberseguridad en el desarrollo de programas desde un primer momento. “Estoy completamente abierto al rubro como un complemento perfecto para mi carrera, o incluso explorar una carrera como SecDevOps”, señala.
Sebastián, Pablo y Camilo.
Por su parte, Pablo relata cómo su interés viene desde chico: “Cuando pequeño me gustaba jugar en el PC, especialmente el GTA San Andreas. Eventualmente quise moddearlo agregando misiones, personajes extra y skins para imitar a otros juegos que no me corrían por las limitaciones de mi compu”. Así fue que Pablo se adentró en la informática y decidió, eventualmente, estudiarla. “Para mí, el hacking tiene que ver con intentar entender en profundidad un algo, para luego ver cómo modificarlo o explotar alguna vulnerabilidad no prevista aplicando la creatividad”, detalla. Y agrega que desde segundo año de la universidad participa en competencias CTF, con sus categorías favoritas siendo el reversing y, luego, el pwn. Ya estudia en ciberseguridad mientras estudia, y pretende seguir ese camino a futuro.
La mayor motivación de Camilo, por su parte, es “poder encontrar y arreglar problemas de seguridad en sistemas”, explica, ya que “encuentro muy interesante profundizar y explotar la creatividad a nivel de encontrar algo que algún desarrollador no se esperaba. Estoy generando un valor al indicar el problema y, en el mejor caso, solucionarlo”.
Camilo hoy trabaja como auditor de seguridad y desea seguir una carrera en ciberseguridad. Sobre este campo, advierte que a ratos puede abrumar la cantidad de información que se requiere para desempeñarse en él, pero que, si uno va a prendiendo de a poco, se puede “crear una especie de mapa mental más organizado, donde uno se empieza a sentir más cómodo, y lo que antes era abrumador, se puede ver con otros ojos y entender más”. Por eso recomienda a quienes se interesen en la ciberseguridad, pero puedan sentirse intimidados, ir averiguando de a poco y aprender así las bases de la materia de forma de no abrumarse.
“Lo bonito de la ciberseguridad es que tiene distintas áreas desde las que un profesional puede involucrarse”, añade Pablo. “Por ejemplo”, explica, “un profesional externo a TI, como un psicólogo o administrador de equipos puede ingresar a través de la ingeniería social, el pentesting físico o en GRC (Governance, Risk Management and Compliance). De la misma forma, un ingeniero no informático puede interesarse en criptografía por su afinidad con las matemáticas, o porque les gustó la programación, aplicando lo que ya sabe con un enfoque distinto, siendo bastante enriquecedor su aporte gracias a sus competencias o habilidades únicas en el área. Pienso que la ciberseguridad es un campo multidisciplinario, y una tarea de todos dentro de la organización”.